La modernidad ha impuesto dos nuevos criterios —sirvan como ejemplos— para la elección de pareja: la compatibilidad psicológica y el atractivo sexual. Ninguno de ellos era importante en la época anterior, la caracterizada por una relación amorosa basada en el carácter. El primero busca algo tan complejo como que dos personas (diferentes psicológicamente por esencia) se entiendan a la perfección y, lo más difícil, lo hagan durante toda una vida. El segundo pretende que el cuerpo se mantenga intacto, o sufra mínimas variaciones. Este objetivo no es difícil, es imposible. El hecho de esperar demasiado (tener unas expectativas demasiado elevadas, que es a lo que nos lleva el nuevo concepto del amor) es una de las razones de tanto fracaso matrimonial como estamos viendo en las últimas décadas.Sofía Amón
Cuando uno está enamorado, siempre comienza engañándose a sí mismo y termina engañando a otros. Eso es lo que el mundo llama amor. Oscar Wilde en El retrato de Dorian Gray.
Imagen por SammCox en flickr
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.